Una vez que hemos identificado todo lo anterior, comenzamos el trabajo de diseño. Con toda su valiosa información se desarrollarán los diseños.
Cuando hayamos creado la propuesta o propuestas iniciales, se las enviaremos al cliente.
El cliente habrá explicado la razón del diseño / concepto para que se pueda llegar a un entendimiento porque todo tiene una razón de ser y que está diseñado de esa manera por alguna razón relacionada con los objetivos que busca alcanzar.
Una vez que se presentan las propuestas, solicitamos comentarios de los clientes, hasta que finalmente se acuerde todo.